Para poder practicar la aromaterapia necesitas utilizar algunos aceites esenciales y compuestos aromáticos naturales. De esta forma se puede promover la salud y encontrarse mucho mejor. Los aceites se suelen extraer de plantas, flores, árboles, raíces y de la vegetación en general. Se basa principalmente en la idea de que los aromas pueden influir en el estado de ánimo y en la salud.
Las civilizaciones que promovieron esta práctica fueron las de Egipto, China e India. Pero hoy en día se conoce practicamente en todo el mundo.
¿Cuales son los principios de la aromaterapia?
Lo primero a tener en cuenta son precisamente los aceites esenciales. Una vez se tiene esto claro pasamos a los métodos de aplicación, que pueden ser de tres tipos: inhalación, aplicación tópica y uso interno.
Una vez aplicados podemos observar algunos efectos puesto que se supone que pueden influir en el cuerpo y la mente.
¿Que tipos de aceites esenciales hay?
Aunque hay de muchos tipos nos gustaría destacar los que pensamos que son los más importantes:
- Lavanda. Indicado para alivar el estrés.
- Menta. Se suele usar para alivar dolores de cabeza.
- Eucalipto. Para resfriados y problemas respiratorios.
- Árbol de Té. Es antimicrobiano y suele usarse para infecciones en la piel.
- Ylang-Ylang. Se utiliza como afrodisiaco y también para reducir la tensión arterial.
¿Hay que tener precauciones con los aceites esenciales?
Lo más importante es darte cuenta de si tu piel es sensible a alguno de ellos. También si tienes algún tipo de alergia o condición médica que pueda poner en peligro tu salud. Pero por norma general suelen ser inocuos.
Si quieres aficionarte a la aromaterapia te recomendamos que te documentes bien previamente, ya que hay mucho que ver al respecto. Pero sin lugar a dudas los resultados positivos siempre llegarán.